Una docena de ellos ha cerrado en la zona metropolitana desde el pasado fin de semana.

Si bien los bares y antros son lugares de esparcimiento muy populares, sobre todo en la zona metropolitana de Querétaro, no todos cumplen con los requisitos necesarios para operar de forma legal.

Las autoridades estatales y municipales intensificaron los operativos de revisión en estos establecimientos, tras el reciente ataque en el bar “Los Cantaritos”, que cobró la vida de 10 personas.

Para que un bar o antro pueda abrir sus puertas al público, es fundamental que cumpla con una serie de requisitos y permisos que regulan su operación y aseguran la seguridad de sus visitantes.

Entre ellos, destaca el visto bueno de Protección Civil. Este documento, revisado por las autoridades, asegura que el espacio cumple con las condiciones de seguridad necesarias, como salidas de emergencia y medidas de protección en caso de siniestros.

Licencia de funcionamiento: es el permiso básico que debe tener cualquier negocio para poder operar. Esta licencia se renueva anualmente y es emitida por el municipio.

Pago de refrendo municipal: este debe ser pagado de manera anual, como una especie de “mantenimiento” del permiso, asegurando que la licencia siga vigente y en regla.

Factibilidad de giro: en algunos municipios, se exige que el tipo de negocio (o “giro”) sea adecuado para la zona donde se encuentra. Este documento regula si el tipo de negocio (en este caso, un bar o antro) puede operar en determinada área.

Aviso de funcionamiento de la Secretaría de Salud: este permiso certifica que el establecimiento cumple con las normas sanitarias.

Licencia para la venta de alcohol: para ofrecer bebidas alcohólicas, es necesario contar con una licencia expedida por la Secretaría de Gobierno del estado. Esta licencia es esencial para la operación de bares y antros, y su falta puede resultar en clausuras inmediatas.

En los operativos, también se verifica que los clientes que acuden sean mayores de edad.

En la última semana, debido a la falta de alguno de estos documentos, al menos una docena de bares y antros han sido suspendidos o clausurados en Querétaro.