Las intensas lluvias registradas en los últimos días provocaron un deslave de gran magnitud sobre la carretera estatal 100, a la altura del kilómetro 45+300, donde aproximadamente 8 mil metros cúbicos de material cayeron sobre la carpeta asfáltica, bloqueando ambos sentidos de circulación.

La noche del domingo se registró el derrumbe de una zona cerril, por lo que desde primeras horas de este lunes, personal operativo y maquinaria pesada de la Comisión Estatal de Infraestructura (CEI) trabajan en la remoción del material y en la estabilización del terreno para prevenir nuevos incidentes.

La titular de la CEI, Sonia Carrillo, acudió al sitio para supervisar los trabajos y explicó que se estima que los trabajos de liberación podrían tardar un par de días, dadas las dimensiones del deslave.

Mientras tanto, se habilitó como ruta alterna el camino viejo que conduce a Tolimán. Las autoridades pidieron a los usuarios respetar las indicaciones del personal operativo desplegado en la zona y evitar circular por ese tramo de la carretera 100 hasta nuevo aviso.

Protección Civil y elementos de seguridad permanecen en el lugar para salvaguardar a la población, mientras se realizan las labores necesarias para restablecer la conectividad en esta vía estratégica para la región serrana del estado.