El Municipio de Querétaro clausuró temporalmente la planta de separación y tratamiento de residuos operada por la empresa Broquers Ambiental, tras detectarse incumplimientos en sus operaciones. La medida se llevó a cabo como parte del Plan Orden, impulsado por la administración municipal.

La Secretaría de Servicios Públicos Municipales, en coordinación con la Secretaría de Desarrollo Sustentable, realizó una supervisión a la planta en la que se identificaron deficiencias, incluyendo el incumplimiento de horarios y condiciones establecidas en la normativa ambiental.

Derivado de esta revisión, el municipio solicitó la intervención de la Procuraduría Estatal de Protección al Medio Ambiente y Desarrollo Urbano (PEPMADU), que determinó la clausura temporal del sitio, al confirmar que no cumplía con los requisitos legales para su operación.

La empresa fue notificada de que dispone de tres días para retirar los residuos acumulados y subsanar las irregularidades detectadas. En caso de no cumplir con estos requerimientos, se impondrán sanciones económicas por cada día adicional de incumplimiento.

El presidente municipal de Querétaro, Felifer Macías, señaló que esta acción forma parte de una revisión integral de las concesiones y licencias vigentes en el municipio. Indicó que se busca garantizar que los servicios operen bajo las condiciones establecidas por la ley.

Por su parte, el secretario de Desarrollo Sustentable del Estado, Marco Antonio Del Prete Tercero, informó que la inspección evidenció fallas en el funcionamiento de la planta. Agregó que se actuó conforme a los procedimientos legales vigentes.

El gobierno municipal reiteró que continuará con la supervisión de las concesiones y servicios para verificar su conformidad con la normativa.