Estudios hechos en México, han encontrado que, por cada 10% de incremento en el precio de los cigarros, el consumo se reduce entre un 5% y un 7%.
Y según el gobierno federal, en reportes elaborados por diferentes dependencias concluyeron que elevar el precio real de los cigarros en un 50% evitaría cerca de 49,400 muertes prematuras y 259,000 casos nuevos de enfermedad, generando ahorros masivos en servicios de salud.
Datos tomados en 2020 señalan que la prevalencia de consumo de tabaco en la población de 12 a 65 años en Querétaro era del 19.1%, lo que significaba alrededor de 281 mil fumadores en ese rango de edad en ese momento.
Reportes previos a 2020 estimaban que anualmente ocurrían 610 muertes atribuibles directamente al consumo de tabaco en el estado, lo que representaba el 7.3% del total de las muertes producidas por enfermedades en la entidad.
Según el secretario técnico del Consejo Estatal Contra las Adicciones, José Juan Piña Tasabia, dijo que el 50% de los paros cardíacos están relacionados con el consumo de tabaco y que a los 12 años de edad es el momento en el que se comienza con el consumo del tabaco.
“Desafortunadamente sí hay mucho consumo en adolescentes y acuden poco a tratamiento porque no hay tanta conciencia del daño que puede tener”, señaló el funcionario.
Consideró que el gravamen impuesto al tabaco ha permitido que se presente un descenso en el consumo de cigarros.
Sin embargo, insistió en que desde el gobierno estatal se trabaja en estrategias de prevención en los municipios, mediante conferencias en las que se tocan temas de los efectos negativos que tiene el tabaco, pláticas que van dirigidas a estudiante, padres de familia y docentes en diversas escuelas.

