
En un movimiento calificado por la oposición como “madruguete”, el grupo legislativo de Morena, junto con la diputada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Georgina Guzmán Álvarez, realizaron una sesión de Pleno en la que eligieron a la nueva Mesa Directiva del Congreso local para el periodo que comprende del 2 de octubre de 2025 al 1 de abril de 2026.
La sesión fue presidida por el diputado Ulises Gómez de la Rosa, vicepresidente de la Mesa Directiva saliente, y contó con la asistencia de 11 legisladores de Morena, la representación del Partido del Trabajo (PT) y una diputada del Verde. Con este quórum, se avaló la integración de la nueva directiva, dejando fuera a diputados del PAN, PRI, MC y a otra legisladora del propio PVEM.
La Mesa quedó conformada de la siguiente manera:
• Presidenta: Georgina Guzmán Álvarez (PVEM)
• Vicepresidenta: Sully Mauricio Sixtos (Morena)
• Suplente de vicepresidenta: María Blanca Flor Benítez Estrada (Morena)
• Primer secretario: Arturo Maximiliano García Pérez (Morena)
• Segundo secretario: Homero Barrera Mcdonald (Morena)
• Suplente de primer secretario: Claudia Díaz Gayou (PT)
• Suplente de segundo secretario: María Eugenia Margarito Vázquez (Morena)
El movimiento se da en un contexto de alta tensión política, tras los incidentes registrados días antes, cuando una sesión para elegir a la Mesa Directiva terminó en empujones, acusaciones y la desaparición de la urna de votación.
Morena defendió la legalidad de la elección, citando los artículos 31 y 94 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo, que establecen que se requieren al menos 13 diputados para sesionar y la conducción del Pleno por la Presidencia o, en su ausencia, por el vicepresidente en funciones, así como la mayoría simple de los integrantes presentes.
La designación de Guzmán como presidenta de la Mesa Directiva no es un tema menor. Este órgano tendrá bajo su responsabilidad la conducción de los trabajos parlamentarios en meses clave, en los que se discutirán asuntos como el presupuesto estatal, la revisión de cuentas públicas y la agenda de reformas pendientes.
Mientras tanto, las bancadas del PAN, PRI y MC acusan a Morena de violentar acuerdos internos y actuar con prácticas autoritarias. Por su parte, los legisladores morenistas señalan que solo ejercieron su mayoría y que la oposición buscaba bloquear la renovación de la Mesa Directiva.