La Comisión Estatal del Agua (CEA) informó que mantiene el monitoreo constante de la presa Zimapán, la cual se encuentra actualmente al 97.4 % de su capacidad. Ante este escenario, no se descarta un posible desfogue ordenado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
En caso de alcanzar el 100 % de almacenamiento, la Conagua podría autorizar una liberación controlada de hasta 500 metros cúbicos por segundo. Esta medida representaría un riesgo para las familias que habitan cerca del río Moctezuma y afectaría la operación del Sistema Acueducto II, encargado de abastecer gran parte de la zona metropolitana de Querétaro.
De llevarse a cabo el desfogue, sería necesario suspender temporalmente el suministro de agua potable en alrededor de 300 colonias, ante la posible contaminación del recurso hídrico.
Las autoridades federales están obligadas a informar con al menos cuatro días de anticipación cualquier maniobra, a fin de implementar las medidas preventivas y alertar a la población.